Comprender el ritmo circadiano del organismo causante de la enfermedad del sueño permite comprender mejor los relojes humanos y albergar esperanzas para el tratamiento de esta grave enfermedad.
¿Puede un parásito alterar el ritmo circadiano? Se sabe que un parásito del género Trypanosoma lo hace, causando una enfermedad conocida como enfermedad del sueño. Aunque esta enfermedad es desconocida en los países occidentales, entenderla permite comprender mejor nuestro propio ritmo circadiano. Además, un mejor conocimiento de este parásito puede conducir a un tratamiento más eficaz para los cientos de miles de personas que sufren sus efectos debilitantes.
¿Qué es la enfermedad del sueño?
Muchos occidentales no han oído hablar de la enfermedad del sueño, pero es una grave amenaza para muchos habitantes de países en desarrollo. Aunque la incidencia de esta enfermedad está disminuyendo gradualmente, sigue siendo un grave problema. Las personas que contraen la enfermedad del sueño, transmitida por la mosca tsetsé en las zonas rurales de muchos países africanos, sufren una amplia gama de síntomas debilitantes y pueden incluso morir si no reciben tratamiento.
Las personas infectadas pueden no ser conscientes de ello hasta que la enfermedad ha alcanzado niveles peligrosos. El parásito se multiplica en su organismo e infecta diversos tejidos antes de entrar en la primera fase, denominada hemolinfática. El huésped comienza entonces a sufrir dolores articulares, cefaleas y fiebre. A continuación, la enfermedad avanza hacia el sistema nervioso en la fase meningoencefalítica. Estas personas muestran confusión, hábitos de sueño extraños, pérdida de coordinación y otros síntomas neurológicos. Esta fase suele ser mortal debido a la gravedad de las infecciones cerebrales.
El ritmo circadiano de los parásitos
Todos los seres vivos tienen un ritmo circadiano, incluido el tripanosoma responsable de la enfermedad del sueño. Aunque este parásito vive exclusivamente en huéspedes y nunca está expuesto a la luz solar ni a otros elementos de la naturaleza, recibe señales del ritmo circadiano de sus huéspedes, así como de sus relojes internos. Los investigadores de Cronobiología se propusieron averiguar qué es exactamente lo que hace girar los relojes internos de un tripanosomay la respuesta fue sorprendente: la temperatura. Demostraron cambios en los genes que se transcriben según un calendario establecido por la temperatura de su huésped. Además, transmiten esta información sobre el tiempo a sus parásitos hijos. De hecho, mantener un ritmo circadiano incluso en ausencia de señales luminosas fue probablemente una ventaja muy importante en la evolución de este parásito, ya que puede atacar los tejidos del huésped cuando son más vulnerables.
¿Cómo pueden utilizarse estos conocimientos para luchar contra esta enfermedad? Estos parásitos parecen ser los más sensibles a los medicamentos utilizados para erradicarlos por la mañana. Esto es especialmente útil porque muchas personas no buscan tratamiento hasta que la enfermedad está tan avanzada que puede ser muy difícil de curar. Es una dulce ironía que utilizando sus propios relojes internos en su contra se pueda tratar una enfermedad que se sabe que afecta al ritmo circadiano humano. La práctica de la cronofarmacología, o programación de los tratamientos para que sean más eficaces, parece ser especialmente importante con esta enfermedad.
¿Cómo puede un tripanosoma alterar el ritmo circadiano?
La enfermedad del sueño provoca diversos efectos, pero sus efectos sobre el ritmo circadiano son algunos de los más destructivos e interesantes. A medida que avanza la enfermedad, las personas empiezan a dormir durante el día y sufren insomnio por la noche. Esto ocurre después de que el parásito haya infectado los tejidos cerebrales. El parásito ataca partes del cerebro responsables de mantener la temperatura y ajustar los relojes internos. El resultado es que las personas empiezan a dormir y despertarse a horas extrañas. Todo su ritmo interno cambia, incluida la temperatura corporal. Esto, a su vez, refuerza los relojes circadianos del parásito.
Parece que nuestros ritmos circadianos pueden verse influidos por diversos factores, desde la luz solar hasta las oscilaciones metabólicas, pasando por un parásito diminuto pero destructivo. Aunque la mayoría de los lectores nunca tendrán que preocuparse por contraer esta enfermedad, esta investigación presenta nuevas opciones para tratar la enfermedad del sueño utilizando la cronofarmacología. Es posible que pronto cientos de miles de personas puedan dormir más profundamente.
