¿Reducir las calorías y comer a la hora adecuada puede alargar la vida? Algunos expertos en salud creen que sí. Aunque es bien sabido que la cantidad de alimentos ingeridos puede influir en la longevidad general, nuevas investigaciones indican que el momento en que se ingieren las calorías también puede afectar a la esperanza de vida. Esta revelación pone de relieve la importancia de comer de forma sincronizada con los ritmos circadianos naturales del cuerpo.
Esto es lo que hay que saber sobre el horario de las comidas para aumentar la esperanza de vida.
¿Es el momento de comer la clave de una vida más larga?
No es sorprendente saber que lo que se ingiere tiene un impacto directo en la esperanza de vida. Sin embargo, lo que puede sorprender a muchos es que el momento en que se come también puede influir en la esperanza de vida.
Un reciente estudio publicado en la revista Science ahonda en esta idea. El equipo de investigadores observó a cientos de ratones durante un periodo de cuatro años. Lo que descubrieron es que una dieta baja en calorías por sí sola se traducía en un aumento de la esperanza de vida del 10 por ciento. Sin embargo, los ratones que comían sólo por la noche, cuando estas criaturas suelen ser más activas, disfrutaban de una esperanza de vida prolongada del 35 por ciento. En resumen, la asociación de una dieta baja en calorías y un horario nocturno de comidas (el equivalente a comer durante el día para los humanos) añadió nueve meses más a la esperanza de vida de los ratones.
Esto podría explicar en parte por qué los trabajadores del turno de noche suelen tener una esperanza de vida más corta. Algunos expertos plantean la hipótesis de que comer por la noche mientras se trabaja en el turno de noche aumenta los niveles de azúcar en sangre, ya que las células beta del páncreas no están preparadas para funcionar como es debido. Dado que estas células beta son las responsables de producir insulina, los niveles de azúcar en sangre aumentarán de forma natural después de comer.
Además, es posible que algunas personas no puedan gestionar la ingesta de alimentos con la misma eficacia durante las horas nocturnas. Este desajuste circadiano puede hacer que todos los relojes internos del cuerpo se desajusten, creando una serie de trastornos metabólicos. El desajuste metabólico resultante es responsable de la aparición de una serie de problemas de salud que pueden afectar a la esperanza de vida.
Aunque reducir las calorías y comer a la hora adecuada puede ser un reto cuando se trabaja en un turno de noche, fomentar los hábitos alimentarios para que estén sincronizados con el reloj interno del cuerpo puede ayudar mucho a mantener bajo control los niveles de azúcar en sangre.
Consejos para reducir las calorías y comer a la hora adecuada
Para aumentar la esperanza de vida, cada vez está más claro que cuándo se come puede ser tan importante como qué se come. Al alinear intencionadamente los horarios de las comidas con los ritmos circadianos internos del cuerpo, reducirá los riesgos de desarrollar una serie de problemas de salud. Esta reducción de los riesgos para la salud aumentará las probabilidades de vivir más tiempo.
Además de prestar atención a los horarios de las comidas para alargar la vida, asegúrese de alimentar su cuerpo con alimentos nutritivos que contribuyan a este objetivo. Estos son algunos consejos que puede seguir para asegurarse de que alimenta su cuerpo de forma que promueva una vida larga y saludable.
Cuidado con los hábitos alimentarios
Es fácil consumir cientos de calorías de más cada día sin darse cuenta. ¿Esa galleta que has cogido de la sala de descanso? ¿Las sobras del plato de su hijo? Todas esas calorías de más pueden sumar, sobre todo cuando se trata de comer sin pensar. Llevar un registro de lo que come a lo largo del día puede ser un ejercicio revelador para algunas personas.
Ahora es más fácil que nunca hacer un seguimiento de las calorías mediante el uso de aplicaciones específicas. Si lo hace, será honesto sobre lo que se lleva a la boca y le ayudará a diseñar un plan de alimentación que se ajuste a sus objetivos de salud.
Una comida al día sin carne
No comer carne al menos una vez al día es una de las formas más sencillas de reducir calorías en la dieta. Por ejemplo, procure utilizar cereales integrales como base de la comida y evitar la carne. A la mayoría de la gente le resulta más fácil hacerlo en el desayuno o en la comida.
Vigile el consumo de azúcar
El azúcar puede ser un verdadero asesino de la dieta. No es raro ingerir demasiada azúcar durante la primera comida del día. La culpa de este mal hábito la tienen los cereales azucarados, los yogures, los batidos y zumos procesados y la bollería. Ser consciente de la cantidad de azúcar que ingieres durante el desayuno te ayudará a empezar el día con buen pie desde el punto de vista nutricional.
Céntrate en los alimentos que te gustan
Aparte de reducir las calorías y comer en el momento adecuado del día, la clave para comer sano de forma constante es centrarse en encontrar alimentos nutritivos que realmente le gusten. Una vez que haya delimitado los alimentos saludables que desea consumir con regularidad, puede convertir su incorporación a su dieta habitual en un hábito.
Si reduce las calorías y come a la hora adecuada, se preparará para una vida larga y saludable.