Dormir es esencial para sentirse, rendir y tener el mejor aspecto posible. Estrechamente vinculado a su salud general, el sueño es importante, así que diseñe su espacio para dormir de modo que le ayude a conseguir la mejor calidad de sueño posible. Para conseguir el mejor entorno para dormir, tenga en cuenta cada uno de sus sentidos y el papel que desempeñan en la creación de un estado propicio para dormir bien.
Crear el espacio adecuado para dormir no tiene por qué ser una empresa costosa. Con una planificación concienzuda, puede crear un gran espacio para dormir incluso con un presupuesto ajustado.
Tenga en cuenta su entorno de sueño
Empieza por definir en tu mente el propósito de tu dormitorio y dejar que esa visión dé forma a tus planes. El objetivo principal de su dormitorio debe ser dormir y eso es lo que debe reflejar el entorno.
Intente que sea tranquilo y relajante, entendiendo lo que significan estos conceptos para usted. Los elementos de entretenimiento estimulantes, como los videojuegos y similares, deben estar en la zona de estar, no en la de dormir. Considere la posibilidad de prohibir totalmente los aparatos electrónicos en el dormitorio para mejorar la calidad del sueño.
Tenga en cuenta lo que ve
Esfuércese por conseguir un dormitorio visualmente tranquilo reduciendo el desorden, que está relacionado con mayores niveles de estrés. El estrés, por supuesto, puede interferir en la calidad del sueño. La luz es un factor importante en la calidad del sueño. Mientras que la luz natural brillante a primera hora del día puede ayudarle a dormir mejor por la noche, la luz brillante por la tarde puede alterar la duración y la calidad del sueño. Esto se debe a que puede retrasar o suprimir la producción de melatonina, a menudo conocida como la hormona del sueño debido a su papel en la sensación de sueño.
Mantenga las luces de su dormitorio tenues por la noche, utilizando lámparas de bajo voltaje en lugar de una luz superior brillante. Cuando se acueste a dormir, asegúrese de que la habitación está a oscuras, ya que incluso una pequeña cantidad de luz puede reducir la calidad del sueño. Las personas que viven en zonas urbanas pueden tener que tomar medidas adicionales para conseguir un entorno oscuro para dormir debido a la contaminación lumínica. Las cortinas opacas pueden ser de gran ayuda, pero si las cortinas que bloquean la luz no entran en tu presupuesto ahora mismo, un simple antifaz de tela para dormir sobre los ojos puede servir.
Haz que se sienta bien
Para dormir mejor, crea un entorno relajante y cómodo. Compra el mejor colchón y la mejor ropa de cama que puedas permitirte. Intenta utilizar fibras naturales que te hagan sentir bien en la piel. Muchas personas encuentran que las mantas con peso les ayudan a sentirse cómodas y confortables. La temperatura desempeña un papel importante a la hora de dormir mejor. El consenso científico general es que alrededor de 65 grados Fahrenheit es la temperatura óptima para una buena noche de sueño.
Cree una rutina nocturna centrada en hacer que su cuerpo se sienta relajado y en reducir el estrés mental, quizás incluyendo la meditación o un baño caliente. Irse a la cama a la misma hora cada noche ayuda al cuerpo y a la mente a acostumbrarse a entrar en modo de relajación y sueño.
Déjese llevar por el aroma
El olor a ropa de cama limpia y a habitación limpia puede ser muy relajante. Proporcione a su lugar de descanso un aroma relajante, tanto si eso significa limpio y fresco para usted como si prefiere probar aromas de aromaterapia que favorezcan el sueño.
La lavanda es una fragancia que favorece la relajación y el sueño, y hay estudios clínicos que demuestran su utilidad. Otros aromas utilizados habitualmente para favorecer la relajación y el sueño son la bergamota, el sándalo, el incienso y la mejorana dulce.
Súbete a las olas del sonido
El sonido puede ser positivo o negativo a la hora de conciliar el sueño. Para algunas personas de sueño ligero, el sonido puede ser un verdadero problema y perturbar mucho el sueño. Si ése es su caso, el ruido blanco o algo similar puede ser una solución, ya que amortigua los sonidos externos que normalmente le despertarían. Otra opción son los tapones para los oídos, baratos y fáciles de usar.
A muchas personas les resulta más fácil dormirse con música tranquila y relajante, o incluso con un audiolibro relajante y no estimulante. Otras encuentran que la música con frecuencias de sonido específicas, como 432 Hz, y los ritmos binaurales les ayudan a conciliar el sueño y pueden tener un impacto positivo en la calidad del sueño.
Qué y cuándo saborear puede marcar la diferencia
Puede que el gusto no sea lo primero en lo que piense cuando piense en preparar un entorno para dormir mejor, pero es un factor importante. Considérelo un trabajo preparatorio importante para su entorno de sueño interior.
Evite la cafeína a partir de primera hora de la tarde o, si es realmente necesario, a última hora de la tarde. El consumo de cafeína a menos de seis horas de acostarse tendrá un impacto negativo en su sueño. Evite los alimentos ultraprocesados. Son malos para la salud y están asociados a una mala calidad del sueño. Los alimentos grasos, con alto contenido en azúcar y picantes cerca de la hora de acostarse pueden dificultarle conciliar el sueño.
No tomes comidas copiosas a última hora de la tarde. En su lugar, elija comidas compuestas por proteínas magras y verduras sanas mínimamente procesadas. Intente comer antes por la noche, en lugar de hacerlo dos horas antes de acostarse.