El insomnio es un problema común y creciente. Cuando no podemos dormir, tendemos a fijarnos en factores ambientales como los niveles de luz y la comodidad de nuestra habitación o cama. Además, tanto médicos como pacientes se apresuran a achacar la falta de sueño al estrés y a otros problemas psicológicos.
Aunque el entorno y el estado de ánimo son muy importantes para dormir bien, hay otro factor que muchos de nosotros pasamos por alto: la dieta. Nuevas investigaciones sugieren que nuestra dieta puede ser más importante de lo que creíamos a la hora de determinar lo bien que dormimos. De hecho, las deficiencias vitamínicas comunes afectan al sueño tanto o más que muchos otros factores del estilo de vida. Aquí tienes seis vitaminas cruciales que tu cuerpo necesita para descansar bien por la noche.
1. Vitamina A: Ayuda a ver la luz (o la oscuridad)
La vitamina A es más conocida por su papel en la visión. Dado que la percepción de la luz y la oscuridad contribuye de forma importante a los relojes internos, la vitamina A también es esencial para regular nuestro ritmo circadiano.
La vitamina A está presente en parte de las células de nuestros ojos que perciben la luz, llamadas opsinas. Cuando estas células funcionan bien y tienen abundante vitamina A, las señales de nuestras retinas pasan a otras zonas del cerebro y controlan cuándo liberamos melatonina. Sin vitamina A, nuestros cerebros y cuerpos no serán tan eficaces a la hora de percibir esta importante señal de sincronización del sueño.
2. La vitamina D: Combatir el insomnio y la apnea del sueño
Millones de personas en todo el mundo padecen insomnio. Muchas otras padecen apnea obstructiva del sueño, una enfermedad en la que los afectados roncan durante toda la noche y dejan de respirar durante largos periodos de tiempo.
Las deficiencias de vitamina D se han relacionado en varios estudios tanto con la apnea obstructiva del sueño como con la corta duración del sueño. Los científicos creen que esto puede deberse a los efectos activadores de esta vitamina sobre varios genes que son importantes para regular el ritmo circadiano. Dado que esta vitamina se produce cuando nuestra piel se expone a la luz, es probable que sea una señal importante para nuestro cuerpo sobre la hora del día.
3. Vitamina E: Antioxidante para un sueño reparador
La vitamina E es uno de los antioxidantes más conocidos, ya que ayuda a reparar el ADN de los daños sufridos durante el día y favorece la correcta cicatrización de células y tejidos. Este potente antioxidante también parece tener un efecto mensurable sobre el sueño nocturno.
Los investigadores analizaron el sueño de sujetos con apnea obstructiva del sueño. A la mitad del grupo se le administraron los antioxidantes vitamina E y vitamina C, mientras que a la otra no. Los que no recibieron los antioxidantes durmieron peor que el grupo que sí los tomó.
Aunque se trata de un estudio pequeño, sugiere que las deficiencias de vitaminas antioxidantes afectan al sueño, además de ponernos en mayor riesgo de padecer enfermedades potencialmente mortales. Esta es sólo una gran razón más para tomar tus vitaminas todos los días.
4. Vitamina C: Protege contra los efectos negativos de los trastornos del sueño
Es probable que la vitamina C afecte al sueño en parte por su acción como antioxidante. Además, esta vitamina agridulce también puede tener otros efectos sobre la salud y el ritmo circadiano. Parece proteger a los insomnes de ciertos efectos negativos de un ritmo circadiano desregulado, como la pérdida de memoria. También puede reparar ciertas estructuras celulares dañadas por los trastornos del sueño.
Si no está durmiendo bien, esta vitamina puede ayudarle a conseguir el sueño que necesita al tiempo que reduce los efectos permanentes y potencialmente mortales de la pérdida de sueño. Es una ventaja que ningún insomne debería rechazar.
5. Vitamina B6: crucial para un ritmo circadiano saludable
Aunque las vitaminas del grupo B son más conocidas por su papel en la producción de energía y el metabolismo, dos de ellas también son importantes para el sueño. Debido a su papel en la producción de melatonina y serotonina, la vitamina B6 es crucial para mantener un ritmo circadiano saludable y obtener el descanso que necesita.
La vitamina B6 también parece ser importante para soñar, una parte esencial del sueño. Las personas que toman esta vitamina son más propensas a recordar sus sueños y a tener experiencias oníricas coloridas. Si su vida onírica no está a la altura, una carencia de vitamina B6 puede ser en parte la culpable.
Aunque una carencia de esta vitamina puede interferir en tus sueños, no debes añadir un suplemento de B6 sin consultar a tu médico. Tomar demasiado de esta vitamina también puede interferir con el sueño, por lo que es importante llegar a ese punto medio perfecto.
6. Vitamina B12: Importante regulador del ritmo circadiano
Dado que esta vitamina es fundamental para regular el ciclo sueño-vigilia, una deficiencia de B12 puede hacer que te sientas privado de sueño y que no puedas dormir al mismo tiempo. Presente en las proteínas animales, esta vitamina desempeña quizá un papel más importante en nuestro ritmo circadiano que cualquier otra vitamina.
Varios estudios han demostrado que la vitamina B12 es un tratamiento eficaz contra el insomnio. Sin embargo, esto viene con una advertencia: al igual que con la B6, tomar demasiada B12 también puede interferir con el sueño.
El ciclo sueño-vigilia es una compleja interacción entre las hormonas, el entorno y el comportamiento. Si no comes lo suficiente de los alimentos adecuados, tu sueño es sólo una de las muchas áreas de tu salud que se resentirán. Mantener un estilo de vida saludable es esencial no sólo para dormir a pierna suelta, sino para disfrutar de la mejor salud y bienestar posibles.