La mayoría de la gente conoce la famosa historia de Ricitos de Oro y los tres osos. Ricitos de Oro, al encontrar tres cuencos de gachas, observó que uno estaba demasiado caliente, otro demasiado frío y el último en su punto. Cuando se trata de dormir, al igual que en los cuentos de hadas, alcanzar un término medio puede ser crucial para obtener buenos resultados.

El problema moderno del sueño

La gente moderna tiene una gran variedad de comodidades, pero luchamos con los hábitos humanos básicos más que nunca. En ninguna parte es esto más evidente que en el área del sueño. Hoy en día, muchas personas no duermen lo suficiente y otras lo hacen con horarios irregulares. Nuestro mundo parece preparado para impedir dormir bien, con contaminación lumínica en cada calle y un smartphone en cada mano.

Aunque a muchas personas les resulta difícil dormir lo suficiente, otras tienen justo el problema contrario. Algunas personas duermen demasiado. Aunque esto pueda parecer imposible para los que no duermen bien, existe el sueño excesivo. Por desgracia, dormir demasiado puede tener graves consecuencias para la salud.

Los efectos sobre la salud de dormir demasiado

¿Cuánto sueño es demasiado? Aunque existen ligeras diferencias de opinión, los expertos en sueño suelen coincidir en que lo óptimo es dormir entre siete y nueve horas. Todo lo que supere esta cantidad se considera demasiado. Sin embargo, las personas que duermen alrededor de siete horas parecen ser las más sanas en general.

La mayoría de las personas no duermen demasiado de forma natural; se despiertan cuando han dormido lo suficiente. Sólo un dos por ciento de la población puede dormir más de nueve horas seguidas. Por razones que no comprendemos del todo, estas personas parecen tener un mayor riesgo de padecer diversas enfermedades.

Las personas que duermen más de nueve horas por noche presentan sistemáticamente tasas más elevadas de obesidad, cardiopatías, accidentes cerebrovasculares y diabetes. También presentan mayores niveles de dolor, inflamación y deterioro cognitivo. Dormir demasiado también se ha relacionado con enfermedades mentales como la depresión. Por último, las personas que duermen más de nueve horas corren el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como el Alzheimer, a una edad avanzada.

¿Dormir demasiado puede provocar una muerte prematura?

Dado que dormir demasiado puede aumentar el riesgo de padecer diversas enfermedades graves, no es de extrañar que también se haya relacionado con la muerte prematura. De hecho, las personas que duermen más de diez horas por noche tienen un 30% más de probabilidades de sufrir una muerte prematura.

Sin embargo, este aumento de la mortalidad no se debe únicamente a los accidentes cerebrovasculares y otras complicaciones conocidas del sueño excesivo. Dormir demasiado se ha relacionado con un aumento de la mortalidad por todas las causas. Esto significa que las personas que duermen demasiado tienen un aumento de la mortalidad por accidentes y otras causas de muerte que no están relacionadas con riesgos conocidos como el ictus y las cardiopatías.

¿El huevo o la gallina?

Los investigadores señalan que actualmente no comprendemos la naturaleza de la relación entre el exceso de horas de sueño y las enfermedades. No hay una causa-efecto clara, ni un proceso fisiológico conocido. Como señala el Dr. Vsevolod Polotsky, de la Facultad de Medicina John Hopkins, «no conocemos exactamente la causa y el efecto. Probablemente funciona al revés, que cuando uno está enfermo, eso le lleva a dormir más».

De hecho, puede que no sea que dormir demasiado provoque una muerte prematura, sino que las mayores necesidades de sueño sean un indicio de enfermedad. Independientemente de la naturaleza de la relación, las personas que duermen sistemáticamente más de nueve horas por noche deberían consultar a su médico. Hay varios problemas de salud tratables, como la apnea del sueño, que pueden aumentar las necesidades de sueño. Al igual que la apnea, muchas de las enfermedades que aumentan las necesidades de sueño pueden causar enfermedades crónicas si no se diagnostican y tratan.

Encontrar el equilibrio perfecto

Dormir la cantidad adecuada de horas no debería ser difícil. En general, si duerme entre siete y nueve horas por noche y se despierta sintiéndose descansado, está durmiendo la cantidad adecuada. Si a menudo necesita más horas de sueño o se siente cansado después de haberlas dormido, es posible que tenga un problema de salud subyacente. En este caso, la mayoría de los médicos recomiendan hacerse un estudio del sueño para asegurarse de que está durmiendo adecuadamente y pasando por las distintas fases del sueño de forma que contribuya a su descanso. Si duerme bien y sigue necesitando más de nueve horas, otras pruebas pueden ayudar a identificar la causa.

Es importante dormir lo suficiente. Sin embargo, si descubre que necesita dormir más de lo razonable, es importante que hable con su médico. Aunque algunas personas simplemente necesitan dormir más que otras, las investigaciones sugieren que dormir demasiado puede ser una importante señal de advertencia de que algo no va bien con su salud.