Con los resfriados y las virulentas cepas de gripe que azotan el país este invierno, muchas personas buscan formas sanas y naturales de evitar enfermar. Hay muchos suplementos en el mercado que ofrecen protección, pero los resultados de las investigaciones científicas son dispares. Sólo hay una cosa que se ha demostrado que ayuda a defenderse de estos virus e invasores bacterianos comunes del tiempo frío: el sistema inmunitario.

Aunque no hay forma de garantizar que su sistema inmunitario sea capaz de mantenerse firme frente a los resfriados y los virus, existen varias maneras de inclinar las probabilidades a su favor. Según una nueva investigación, dormir lo suficiente puede marcar la diferencia en la batalla inmunitaria: Dormir lo suficiente protege contra los virus del resfriado y la gripe, ya que ayuda a su sistema inmunológico de varias maneras clave.

Sueño e inmunidad

Probablemente haya notado que no se siente bien después de una noche de sueño de mala calidad (o sin dormir). El insomnio y otros trastornos del sueño también afectan al sistema inmunitario. Las personas privadas de sueño entran en un modo de estrés fisiológico, en el que su organismo se centra principalmente en las actividades esenciales. Esto se traduce en una menor inmunidad general a los gérmenes que llenan el mundo que nos rodea cada temporada de resfriados.

Esta es probablemente una de las razones por las que el insomnio y otros trastornos del sueño se han relacionado con mayores tasas de enfermedades infecciosas. En un estudio, los investigadores analizaron a las personas que dormían seis o más horas cada noche y a las que dormían menos. También hicieron un seguimiento de la frecuencia con la que estas personas enfermaban. Las personas que dormían menos de las seis o más horas recomendadas tenían 4,5 veces más probabilidades de contraer una enfermedad infecciosa. Esto era cierto incluso cuando se ajustaban otros factores como la edad y el estado general de salud.

¿Cuál es la conclusión? Independientemente de otros factores de riesgo, es menos probable enfermar si se duerme seis o más horas cada noche. Pero, ¿a qué se debe esto?

Cómo protege el sueño contra el resfriado y la gripe

Cada día estamos expuestos a cientos de miles, incluso millones, de gérmenes. Entre ellos se encuentran bacterias y virus. Nuestro sistema inmunitario está bien entrenado para combatir la mayoría de estos gérmenes. Cuando las bacterias o los virus pueden eludir nuestro sistema inmunitario el tiempo suficiente para infectarnos, enfermamos.

El sueño parece reforzar nuestro sistema inmunitario de varias maneras. Un estudio descubrió que dormir lo suficiente puede aumentar el número de una célula inmunitaria especializada llamada célula T. Las células T son cruciales para reconocer y combatir la mayoría de estos gérmenes. Las células T son cruciales para reconocer y atacar células invasoras como los virus. El aumento de los niveles de células T significa una mayor probabilidad de combatir el resfriado o la gripe antes de estornudar.

Además, nuestro sistema inmunitario depende en gran medida de la memoria inmunitaria. Una vez que el sistema inmunitario se ha enfrentado a un germen causante de una enfermedad, está mejor preparado para reconocerlo en el futuro y eliminarlo antes de que pueda causar una infección. El sueño parece desempeñar un papel en la formación de la memoria inmunológica. Las células que forman nuestra memoria inmunológica están en sus niveles más altos cuando estamos en sueño profundo de ondas lentas. Cuando no dormimos lo suficiente, tenemos niveles más bajos de las células en las que confiamos para no enfermar del mismo resfriado que tuvimos el año pasado.

Prevenir las enfermedades de forma natural

Con la temporada de resfriados y gripe en pleno apogeo, dormir lo suficiente es más importante que nunca. Sin embargo, hay otras cosas que puede hacer para fortalecer tus defensas contra los gérmenes que te rodean. Considere las siguientes opciones para reforzar la inmunidad, basadas en investigaciones sólidas:

• Lávese las manos o utilice desinfectante de manos portátil con frecuencia.
• Pida a las personas enfermas que le rodean que utilicen mascarillas y que tosan o estornuden en el brazo en lugar de en las manos.
• Beba mucha agua, unos ocho vasos llenos al día.
• Evite dar la mano y realizar otras actividades que le pongan en contacto directo con manos y caras.
• Siga una dieta sana, con mucha fruta y verdura; éstas contienen los nutrientes que su sistema inmunitario necesita para funcionar de forma óptima.
• Evite el frío o el calor excesivos vistiéndose en capas que pueda ponerse o quitarse según sea necesario.
• Siempre que sea posible, evite los lugares concurridos, como los actos públicos y los centros comerciales.
• Haga ejercicio a diario.
• Vacúnese; aunque no le protegen contra todas las cepas de la gripe, le darán inmunidad contra las que se consideran más propensas a causar enfermedades graves en un año determinado.

No hay forma de garantizar que no vaya a tener fiebre o mocos mañana. Sin embargo, un estilo de vida sano le garantizará las mejores posibilidades de luchar contra las enfermedades estacionales comunes.