El reloj circadiano, que funciona según el ritmo circadiano de aproximadamente 24 horas que refleja el ciclo día-noche de la Tierra, desempeña un papel vital en la regulación del calendario de los procesos corporales esenciales. Como tal, el reloj circadiano está estrechamente relacionado con la salud humana. La alteración crónica del ritmo circadiano, como la que suelen sufrir los trabajadores por turnos, aumenta significativamente el riesgo de cáncer, lo que ha llevado a clasificar dicha alteración como carcinógeno. Para una función celular y una salud óptimas, es esencial preservar un ritmo circadiano saludable.

Cómo se relacionan el cáncer y el reloj circadiano

Los investigadores han encontrado importantes vínculos entre el cáncer y el reloj circadiano. Estos vínculos se dividen a grandes rasgos en dos grupos: el aumento del riesgo de desarrollar cáncer y la eficacia de los tratamientos oncológicos en la lucha contra la enfermedad. Las alteraciones del ritmo circadiano afectan tanto al riesgo de cáncer como a la eficacia de los tratamientos, según los resultados de numerosos estudios.

La conexión entre el reloj circadiano y el cáncer radica en el papel que éste desempeña en la función y la salud de las células. Los ritmos circadianos son poderosos impulsores de los procesos físicos, hasta el nivel celular, e incluso el funcionamiento de las células individuales se ve influido por los ritmos circadianos. El reloj circadiano funciona como un reloj maestro, sincronizando las funciones de sincronización de todos los relojes corporales individuales del cuerpo, manteniendo múltiples sistemas altamente complejos trabajando juntos como un todo integrado en apoyo de la salud y el bienestar general.

Las alteraciones que afectan al reloj circadiano contribuyen de diversas formas a aumentar el riesgo de cáncer. Los resultados de los estudios han demostrado que la alteración del ritmo circadiano está asociada a la disfunción de genes que suprimen el desarrollo y el crecimiento de tumores. Los ritmos circadianos afectan a todas las fases del ciclo vital celular, incluidas la división y la replicación, y sus alteraciones pueden tener un impacto negativo en estos procesos. La alteración circadiana crónica puede afectar a la producción hormonal y al metabolismo, que dependen de reacciones químicas programadas con precisión, lo que aumenta el riesgo de cánceres relacionados con las hormonas, incluido el de mama.

Los investigadores están descubriendo que, en lo que respecta al tratamiento del cáncer, también existen vínculos entre el reloj circadiano y la eficacia de los fármacos oncológicos. La alteración del ritmo circadiano puede disminuir la eficacia de los tratamientos contra el cáncer al contribuir a un mal funcionamiento de las células, a una menor respuesta del sistema inmunitario y a un funcionamiento deficiente del sistema metabólico. Otro punto de conexión entre el reloj circadiano y el tratamiento del cáncer radica en el elemento temporal. Cada vez hay más pruebas de que el momento en que se toman los medicamentos contra el cáncer puede influir en su eficacia. Tomar los medicamentos teniendo en cuenta el patrón de actividad diurna de las células puede producir resultados mejores y más eficaces.

La cronoterapia puede ser beneficiosa para el tratamiento del cáncer

La cronobiología es un campo de la biología centrado en los ritmos naturales, los patrones y los tiempos que sustentan las funciones biológicas. Este campo biológico tiene una amplia gama de aplicaciones médicas, a menudo descritas con el término cronoterapia, siendo la más conocida el tratamiento de los trastornos del sueño. Con el aumento de los conocimientos sobre el impacto de los ritmos circadianos en el funcionamiento físico y la salud, el uso de la cronoterapia en la elaboración de planes de tratamiento para otras dolencias y enfermedades se ha ampliado para incluir el tratamiento del cáncer.

La planificación de la medicación contra el cáncer para aprovechar los ritmos naturales del organismo ha resultado prometedora. Por ejemplo, planificar el uso de la medicación según los picos y valles de la actividad celular, como el crecimiento y la reparación celular, la reparación del ADN y la función metabólica, puede permitir que esos fármacos alcancen mejor sus objetivos médicos y reducir potencialmente el impacto negativo de los efectos secundarios de los medicamentos. Trabajar con el ritmo circadiano individual de una persona permite que el tratamiento se adapte específicamente a cada paciente; algo que puede tener un impacto positivo en las tasas de éxito del tratamiento.

La cronoterapia también puede utilizarse para ayudar a restablecer un ritmo circadiano más equilibrado y saludable. Esto, a su vez, puede ayudar a reforzar la respuesta inmunitaria y activar las células asesinas que combaten los tumores. El uso de la información que proporciona la cronobiología sobre la mecánica y la sincronización del metabolismo para crear un plan de nutrición basado en la cronoterapia puede ser una parte valiosa del apoyo a un ritmo circadiano saludable, un sistema inmunológico fuerte y la salud y el funcionamiento celular en general, todos los cuales son esenciales para el éxito del tratamiento del cáncer.

Proteja su reloj circadiano y su salud

Un ritmo circadiano saludable es el elemento clave para proteger el funcionamiento de su reloj circadiano. Al proteger el funcionamiento de su reloj circadiano, ayuda a proteger su salud. Establezca horarios regulares para levantarse y dormir, acostándose y levantándose a la misma hora todos los días, incluso en los días libres.

La luz, la actividad física y la ingesta de alimentos son algunas de las señales más importantes para su ritmo circadiano. Mantenga un horario regular de comidas y evite las cenas copiosas, sobre todo a menos de dos horas de acostarse. Coma alimentos nutritivos e integrales y evite los alimentos muy procesados. Practique suficiente actividad física a diario, haciendo un esfuerzo especial para realizar parte de esa actividad al aire libre, bajo el sol de la mañana.