Las decisiones forman parte de la vida. Todos las tomamos: grandes y pequeñas, buenas y malas. Podría decirse que vivir mejor y alcanzar nuestro máximo potencial está directamente relacionado con tomar las mejores decisiones. Y, según numerosos estudios, la capacidad de tomar las mejores decisiones puede depender de la comprensión de la importancia del momento oportuno para tomarlas. Investigaciones recientes han subrayado este concepto, sugiriendo que el reloj circadiano puede determinar el mejor momento del día para tomar una decisión. Siga leyendo para saber cómo entender su cronotipo y cómo afecta a su cerebro y a sus procesos de toma de decisiones puede ayudarle a elegir mejor cuando es importante.
La relación entre el reloj circadiano y el cronotipo
El concepto de reloj circadiano parece relativamente sencillo (un ciclo de actividad de aproximadamente 24 horas que se corresponde con el día y la noche) hasta que nos damos cuenta de que afecta a todo. La sincronización es clave para todo lo que ocurre en el cuerpo y la mente, desde la producción y liberación de hormonas y otras interacciones químicas que transforman los alimentos en energía hasta la propia mecánica de la cognición. El reloj circadiano, regulado por los ritmos circadianos generales, que dependen de factores ambientales como la luz, los niveles de actividad física y el horario de las comidas, ayuda a sincronizar los innumerables relojes de todo el cuerpo, influyendo en la actividad hasta el nivel molecular y en las actividades diarias de cada célula.
El reloj circadiano y el ritmo circadiano general también ayudan a regular el tiempo de sueño. Sin embargo, el tiempo de sueño también influye en el ritmo circadiano. Aquí es donde entra en juego el cronotipo. Su cronotipo es el horario preferido por su cuerpo para dormir y realizar actividades. Aunque tener una preferencia puede indicar elegir entre varias opciones, los científicos también han descubierto que existen aspectos genéticos y hereditarios en el cronotipo. Tu cronotipo puede influir en la sincronización de tu reloj circadiano y en tus ritmos circadianos en general, y viceversa.
Elegir el mejor momento del día para tomar una decisión
Mientras que en los primeros días de la investigación sobre el cronotipo había dos cronotipos – el pájaro madrugador o la alondra y el búho nocturno – hoy en día hay cuatro cronotipos primarios. Son el león, el oso, el lobo y el delfín. Su cronotipo, que también influye en su reloj circadiano, determinará a qué hora del día está usted mentalmente más alerta y ágil, algo que puede afectar a la velocidad y calidad de su capacidad para tomar decisiones.
Las personas que pertenecen a la categoría de los leones tienden a levantarse temprano, a menudo antes que el sol, y son más productivas antes del mediodía. Los osos se levantan con el sol y también son más productivos antes del mediodía, con un descenso de la productividad entre las 14:00 y las 16:00. Los lobos se levantan más tarde y son más productivos entre el mediodía y las 16:00, con un segundo aire o aumento de la productividad hacia las 18:00. Los delfines tienden a ser más productivos entre las 10:00 y las 14:00 horas.
En general, el rendimiento cognitivo máximo coincide con nuestros periodos más productivos. Cuanto más compleja sea una decisión, más implicada estará la corteza prefrontal en ella. Además de gestionar los complejos procesos que conlleva la toma de decisiones, como sopesar los pros y los contras de las distintas opciones y calcular los posibles resultados asociados a cada una de ellas, el córtex prefrontal también ayuda a mantener bajo control la asunción de riesgos y las acciones impulsivas. Así, tomar decisiones importantes, como las que tienen que ver con los negocios o el dinero, las relacionadas con la moralidad o la ética y otros tipos de decisiones importantes y multivariables, es mejor hacerlo por la mañana, ya que la mañana viene definida por su propio reloj circadiano y su cronotipo.
Sin embargo, en la vida, no todas las decisiones se meditan y se toman con cuidado. Algunas cosas se deciden rápidamente, sobre la marcha, en un instante. De hecho, algunas de esas decisiones implican o incluso requieren un cierto grado de impulsividad o de asunción de riesgos. Según un estudio en el que participaron jugadores de ajedrez en línea -objetos ideales para estudiar la toma de decisiones debido a la naturaleza del juego-, parece existir un patrón diurno en la toma de decisiones, en el que las decisiones más lentas, deliberadas y precisas de la mañana dan paso a decisiones más arriesgadas y rápidas a medida que avanza el día.
Aproveche sus conocimientos sobre la toma de decisiones
Aunque muchas decisiones importantes se toman mejor tomándose tiempo y pensando detenidamente, no siempre es así. Algunas situaciones exigen pensar y evaluar con rapidez, con un poco de impulsividad y asunción de riesgos.
Conozca su cronotipo y el papel de su reloj circadiano para poder determinar con precisión su ventana de máximo rendimiento cognitivo y tomar las decisiones importantes que requieran una reflexión profunda durante ese periodo. Intente evitar tomar decisiones finales de ese tipo durante la parte del día en la que es probable que tenga un control prefrontal reducido de su asunción de riesgos e impulsividad. Programe los proyectos o actividades que requieran un poco de impulsividad o asunción de riesgos para tener éxito en la parte del día en la que es menos probable que su corteza frontal reprima esas cualidades.