Según una nueva investigación, la función renal y los ciclos de sueño están estrechamente relacionados. No dormir lo suficiente está relacionado con una rápida disminución de la función renal.
La falta de sueño se ha relacionado con muchos problemas de salud en el pasado. Esto es cada vez más evidente, ya que la cantidad media de sueño ha disminuido en los últimos 20 años. En lugar de dormir unas ocho horas cada noche, la mayoría de los estadounidenses duermen ahora seis horas y media o menos. Un nuevo estudio ha descubierto que los cambios en los ritmos circadianos pueden afectar drásticamente a la salud renal.
El estudio del Dr. Ciaran Joseph McMullan
Recientemente, la Dra. McMullan presentó sus hallazgos en la Semana del Riñón de la Sociedad Americana de Nefrología. En este estudio, la Dra. McMullan y un equipo de investigadores analizaron a más de 4.000 sujetos. Descubrieron que los pacientes que dormían poco tenían riñones con menos probabilidades de funcionar eficazmente. Dado que el estudio se realizó en un hospital de mujeres, los resultados sólo son técnicamente precisos para las mujeres, pero es probable que se apliquen a todos los géneros. En general, los sujetos que no dormían al menos cinco horas tenían un 65% de probabilidades de sufrir un deterioro de la función renal. En comparación con los sujetos de prueba que habían descansado completamente, los pacientes que dormían menos tenían riñones que no funcionaban tan bien. Entre los miles de pacientes del estudio, los que sufrían privación de sueño tenían muchas más probabilidades de tener problemas renales.
¿Por qué afecta el sueño a la función renal?
Aunque el estudio no está completamente seguro de la razón de la correlación entre la falta de sueño y el deterioro renal, los investigadores teorizan que tiene algo que ver con el ritmo circadiano natural. Los órganos del cuerpo siguen de forma natural un ritmo diario que se basa en los ciclos normales del sueño y en un día de aproximadamente 24 horas. Dado que dormir mal también afecta al corazón y a los niveles de insulina, es posible que esto provoque que los riñones funcionen de forma diferente. El Dr. McMullan teoriza que «dormir poco cambia la fisiología del riñón a lo largo del ciclo diario, y estos cambios podrían dañar el riñón». Los cronobiólogos esperan investigar más sobre el tema para avanzar en su comprensión.
¿Por qué es importante?
Este estudio es el primero que analiza la relación entre la función renal y los ciclos de sueño. Los riñones son órganos extremadamente importantes de los que el cuerpo depende a diario. Los riñones ayudan a filtrar toxinas, excretar residuos, regular la presión sanguínea, influir en la creación de glóbulos rojos y equilibrar los niveles de ácidos y bases en el organismo. Si los riñones empiezan a funcionar de forma incorrecta, los residuos se acumulan en el organismo y provocan diversos problemas. Por lo tanto, es esencial que los riñones funcionen lo mejor posible. Si los estadounidenses siguen durmiendo cada vez menos, es probable que aumente el número de personas con problemas renales. Afortunadamente, dormir lo suficiente puede ayudar a mantener una salud renal óptima.