Los ritmos circadianos, o relojes biológicos internos de 24 horas, son objeto de numerosos ensayos de investigación en la actualidad. Los científicos están empezando a descubrir los efectos de los ciclos de luz y oscuridad en el cuerpo humano, que constituyen un nuevo campo de la biología llamado cronobiología. Las últimas investigaciones demuestran que estos relojes internos no sólo controlan nuestro estado de ánimo, nuestros niveles de energía y nuestras hormonas, sino también la salud de nuestra piel.
Los relojes internos de las células cutáneas
Muchas funciones de los ritmos circadianos están controladas por el núcleo supraquiasmático del cerebro. Sin embargo, muchos tipos de células diferentes tienen sus propios relojes internos. Estos relojes crean ondas de actividad en función de la hora del día. Las células de la piel también tienen estos relojes. Las células madre de la epidermis se reproducen principalmente por la noche, creando nuevas células cutáneas que sustituyen a las envejecidas y reducen el aspecto del envejecimiento. Además, la reparación del ADN se produce principalmente durante determinadas horas del día, lo cual es importante porque se trata de la primera línea de defensa del organismo contra los daños causados por los rayos UV y el cáncer de piel.
Dado que las células de la piel realizan diferentes actividades durante las distintas horas del día, también son más sensibles a los daños en determinados momentos. Comprender el ritmo circadiano de las células cutáneas puede ser una forma importante de prevenir el envejecimiento prematuro y el cáncer de piel.
Los genes CLOCK y la piel
Las últimas investigaciones indican que los genes CLOCK, previamente identificados en otros tipos de células, son los que probablemente afectan a los relojes internos de las células de la piel. La epidermis desempeña un papel importante en la salud. Separa nuestros órganos vitales de las influencias nocivas del entorno exterior, como los rayos UV, los productos químicos, la oxidación y el estrés mecánico. Los genes CLOCK de las células epidérmicas parecen anticipar los momentos de mayor estrés y programar las reparaciones.
Parece que la reparación del ADN en las células de la piel se produce por la tarde y por la noche. Estas son las horas en las que la piel está más expuesta a los rayos UV directos. A última hora de la noche se produce la proliferación de células madre epidérmicas. Se cree que la proliferación se produce por la noche porque es el momento en que estos delicados procesos tienen menos probabilidades de ser interrumpidos o perturbados. El resultado es que los daños en el ADN que se producen por la mañana y por la noche, especialmente los causados por los rayos UV, tienen menos probabilidades de repararse a tiempo, mientras que las personas que trasnochan exponiendo su piel a la luz y a sustancias químicas como el alcohol y el tabaco pueden sufrir un envejecimiento prematuro.
Efectos de los ritmos circadianos en la piel
Antes de que se descubrieran los genes CLOCK, los científicos ya habían observado que el estado de la piel varía de forma predecible a lo largo de un ciclo de 24 horas. Por ejemplo, las mujeres suelen considerar que su piel es más atractiva por la mañana que por la tarde, lo que ahora sabemos que se debe probablemente a la proliferación de nuevas células cutáneas por la noche. Además, se ha demostrado que las cremas antienvejecimiento son más eficaces cuando se utilizan antes de acostarse.
Además, la piel parece ser más sensible a la inflamación en determinados momentos del día. Los síntomas de la dermatitis atópica empeoran por la noche, que es también cuando la psoriasis es más grave. Las personas que se someten a pruebas de alergia y pruebas cutáneas de la tuberculosis tienen menos probabilidades de dar positivo cuando la prueba se realiza por la mañana en lugar de por la tarde o por la noche.
¿Es el momento oportuno la clave de la prevención?
Aunque el estudio del ritmo circadiano de la piel se encuentra todavía en sus fases iniciales, es posible que estos conocimientos puedan utilizarse para prevenir y tratar mejor los trastornos cutáneos. Por ejemplo, los medicamentos para la psoriasis y la dermatitis pueden ser más eficaces si se administran por la noche, ya que es el momento en que se producen los brotes. Si hay que exponerse a los rayos UV, puede hacerse por la tarde o a primera hora de la noche. Los tratamientos contra el cáncer de piel, como la quimioterapia, pueden ser más eficaces si se planifican para que coincidan con los momentos más eficaces del ciclo celular cutáneo.
La cronobiología es un campo emergente que está demostrando ser cada vez más importante en la salud humana. Comprender los genes CLOCK y sus efectos en las células de la piel puede ser una forma importante de prevenir el cáncer de piel, el envejecimiento prematuro y diversos trastornos cutáneos.