Una nueva herramienta llamada CYCLOPS puede cambiar la forma de estudiar el ritmo circadiano al permitir a los investigadores examinar más fácilmente los ritmos circadianos en células humanas vivas.
Gran parte de la investigación sobre los mecanismos moleculares subyacentes al ritmo circadiano se realiza en ratones, moscas de la fruta y otros animales. Hay una buena razón para ello: Identificar ritmos en células humanas puede suponer un enorme reto ético y logístico. Los investigadores son reacios a tomar muestras vivas de seres humanos, y mucho menos a tomar varias de ellas a lo largo del día. Sin embargo, una nueva herramienta llamada CYCLOPS puede facilitar el estudio del ritmo circadiano humano en profundidad y en el propio tejido humano vivo.
¿Qué es CYCLOPS?
La tecnología puede cambiar la forma en que estudiamos la salud humana e incluso cambiar la forma en que tratamos afecciones médicas comunes. CYCLOPS puede revolucionar no sólo el mundo de la cronobiología, sino la medicina en su conjunto. ¿Qué es esta nueva herramienta revolucionaria? CYCLOPS, abreviatura de «CYClic Ordering by Periodic Structure», es un algoritmo informático capaz de compilar datos existentes sobre la actividad celular para identificar ritmos. En la actualidad disponemos de mucha información sobre muchas células, pero no tenemos forma de saber de manera concluyente si su actividad varía de manera predecible a lo largo del día. CYCLOPS presenta una nueva oportunidad.
Aplicar la informática a la salud humana
Este nuevo algoritmo no ofrece un beneficio meramente teórico. En CYCLOPS reside el potencial para tratar con mayor eficacia diversas afecciones humanas. Por ejemplo, este algoritmo detectó que el gen que codifica el transportador celular de glucosa GLUT2 es extremadamente activo en algunos momentos del día, pero casi silencioso durante otros. Esto es importante porque un fármaco común utilizado para el cáncer de páncreas, la estreptozocina, puede tener efectos mortales cuando se une a este transportador. La administración de estreptozocina en los momentos del día en que es menos probable que interactúe con GLUT2 reducirá probablemente las elevadas tasas de mortalidad de este cáncer mortal. La práctica de administrar medicamentos en momentos estratégicos para evitar efectos secundarios o potenciar el efecto terapéutico, conocida como cronofarmacología, puede convertirse en algo habitual una vez que conozcamos mejor el comportamiento celular a lo largo de las 24 horas del día.
El cáncer de páncreas es poco frecuente, pero enfermedades aún más comunes podrían tratarse más eficazmente con esta tecnología. Se ha descubierto que los inhibidores de la ECA, una clase de medicamentos que se utilizan para diversas afecciones, entre ellas la hipertensión, son más eficaces cuando se toman por la noche. Gracias a este nuevo algoritmo informático, ahora sabemos exactamente por qué ocurre esto y podemos planificar el tratamiento en consecuencia. Los hipertensos pueden obtener mejores resultados con cantidades menores de inhibidores de la ECA y evitar complicaciones como ictus, infartos y aneurismas.
Vivir mejor gracias a la ciencia moderna
Comprender mejor nuestros ritmos circadianos ha sido difícil hasta ahora. Sin embargo, CYCLOPS ofrece una nueva forma de realizar investigaciones que pueden tener un beneficio tangible para muchos de nosotros. Esto abre nuevas posibilidades para la cronofarmacología y una variedad de tratamientos basados en el conocimiento de la cronobiología. Aunque parezca descabellado afirmar que un programa informático puede salvar vidas, esta tecnología tiene realmente ese potencial.