Un nuevo estudio realizado por un equipo de investigadores del Skidmore College, la Universidad del Estado de Arizona y la Universidad del Estado de California ha aportado nuevos datos sobre cómo la hora del día puede influir en el resultado del ejercicio. Este nuevo estudio, publicado en la revista Frontiers in Physiology, confirma investigaciones anteriores que indicaban que el momento de hacer ejercicio puede influir en sus resultados. La nueva investigación también reveló que el mejor momento para hacer ejercicio para hombres y mujeres puede diferir.
Aunque el estudio fue pequeño, los resultados fueron intrigantes, sugiriendo áreas importantes para futuras investigaciones que pueden resultar valiosas para maximizar los beneficios del ejercicio para la salud y el bienestar.
La hora del día influye en los resultados del ejercicio
Como ya han establecido los investigadores, la hora del día en que se hace ejercicio influye en los resultados del mismo. Esto se debe, en parte, al papel que desempeña el ritmo circadiano a la hora de regular el calendario de innumerables procesos del organismo, incluidos los procesos metabólicos o relacionados con la energía.
Estos procesos se desarrollan de acuerdo con el horario básico que los humanos hemos mantenido durante la mayor parte de nuestra historia: estar activos durante el día y descansar por la noche. Nuestro cuerpo, hasta nuestras células individuales, realiza diferentes tareas en diferentes momentos del día. Así, hacer ejercicio por la mañana puede tener un impacto diferente que hacerlo por la tarde.
El ejercicio matutino, por ejemplo, tiende a promover una mayor quema de grasas que el ejercicio nocturno. Esta diferencia está relacionada con lo que ocurre en el cuerpo en esos momentos concretos. Los niveles de glucógeno son bajos por la mañana porque el suministro de glucógeno (la glucosa almacenada de los carbohidratos) se agota durante la noche para mantener el cuerpo en funcionamiento mientras duermes. Con poco glucógeno como combustible, el cuerpo quema grasa para alimentar sus actividades. Más tarde, cuando el metabolismo se ralentiza y se han recuperado los niveles de glucógeno mediante el consumo de hidratos de carbono, se quema glucosa antes de empezar a quemar grasa.
Aunque el ritmo circadiano puede influir en los efectos del ejercicio en diferentes momentos del día, el ejercicio también puede afectar a la salud del ritmo circadiano. El ritmo circadiano se ve afectado por una serie de señales externas y ambientales. La luz es la señal más poderosa, pero la actividad física o el ejercicio y el horario de las comidas también influyen significativamente en la salud del ritmo circadiano. El ejercicio puede ser una herramienta valiosa para mantener o incluso restablecer el ritmo circadiano.
Diferencias en el mejor momento para hacer ejercicio para hombres y mujeres
El nuevo estudio confirmó las conclusiones de otros investigadores en estudios anteriores sobre el mayor beneficio para la quema de grasas del ejercicio matutino. Este pequeño estudio duró 12 semanas e incluyó a 26 hombres y 30 mujeres, todos ellos sanos, no fumadores, con inclinaciones atléticas y que mantenían un peso corporal delgado y saludable. Los participantes en el estudio se dividieron en dos grupos: un grupo hacía ejercicio por la mañana, de 6:00 a 8:00, y el otro por la tarde, de 18:30 a 20:30. Los investigadores no buscaban específicamente diferencias entre hombres y mujeres en este estudio, pero sí surgieron algunas diferencias notables.
En el caso de las mujeres, el ejercicio matutino produjo una mayor quema de grasa, incluida la grasa abdominal, un aumento de la potencia de los músculos de la parte inferior del cuerpo y una presión arterial más baja. Las mujeres que hacían ejercicio por la tarde experimentaron mayores beneficios en la fuerza de la parte superior del cuerpo, mejor control del hambre y mejor estado de ánimo, incluida la reducción de la depresión y la sensación de menos tensión y estrés.
La hora del día no pareció importar mucho a los hombres a la hora de mejorar su rendimiento físico, ya que los grupos de ejercicio diurno y nocturno mostraron mejoras similares. Los hombres que hacían ejercicio por la tarde sí experimentaron mayores beneficios relacionados con la salud metabólica y la salud cardiaca. También experimentaron una mayor energía, sintiéndose menos cansados en general. Curiosamente, según los investigadores, los hombres notaron más efectos beneficiosos en el estado de ánimo que las mujeres. Esto fue así tanto para los hombres que hacían ejercicio por la mañana como para los que lo hacían por la tarde, y ambos grupos informaron de una disminución de los niveles de ira, depresión y tensión general.
Un horario específico puede ayudarle a alcanzar sus objetivos de ejercicio
La mayoría de las personas hacen ejercicio con una serie de objetivos en mente, como mejorar su salud física, aumentar su fuerza y resistencia, combatir la depresión, reducir el estrés, promover la salud del ritmo circadiano o dormir mejor. La planificación del ejercicio es una forma inteligente de ayudarle a alcanzar sus objetivos.
Cuando se trata de disfrutar de los beneficios del ejercicio nocturno, dependiendo de su cronotipo individual -cuándo prefiere estar activo y cuándo prefiere dormir- puede que tenga que experimentar un poco para encontrar un momento que no interfiera con su horario de sueño. Para algunas personas, hacer ejercicio demasiado cerca de la hora de acostarse puede dificultar conciliar el sueño a la hora habitual. Comente siempre cualquier cambio importante en sus niveles de actividad física con su médico, sobre todo si ya tiene problemas de salud.